Una película sobre el tema del acoso escolar, desde un punto de vista muy duro, con una violencia que llega a incomodar al expectador y con unos actores, cuyo doblaje hizo que algunas interpretaciones no fuesen creibles por culpa de unas voces que restaban credibilidad a los actores. Una historia sobre una madre y su hijo, que tras la muerte del padre, se trasladan a Barcelona, donde empezar una nueva vida en un nuevo trabajo y un nuevo colegio, donde Jordi comienza s sufrir un acoso brutal por parte de un compañero de clase.
Los actores jovenes están bien en sus papeles de acosado y acosador, en una cinta en la que la ceguera de varios afectados, les impide darse cuenta del terrible acoso que sufre el joven protagonista; los profesores del instituto no ven nada; la madre, una pobre inepta que sufre una depresión, tampoco nota cómo la violencia que su hijo sufre en el colegio y fuera de él, están dinamitando su autoestima, y encima los compañeros tampoco ayudan, silenciando cobardemente dicho acoso, con lo que se va creando un ambiente agobiante y desasosegante que llega a hacer realmente incomoda la situación del protagonista.
Cinta de la que se podía haber sacado mucho más y que no esta a la altura de Cobardes, otra cinta sobre el acoso que se presento el año pasado en el Festival de Malaga .
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