viernes, 24 de diciembre de 2010
La navidad ya está aqui
martes, 21 de diciembre de 2010
La ausencia triste
lunes, 20 de diciembre de 2010
Lajka ya me dejó
martes, 30 de noviembre de 2010
jueves, 18 de noviembre de 2010
Un amanecer otoñal (Post 150)
martes, 19 de octubre de 2010
Se acabó el pastel (Heartburn)
jueves, 30 de septiembre de 2010
Wishing on a star de Randy Crawford
Conoci esta canción alla por 1990 cuando viajé a Bournemouth (Reino Unido) para hacer un curso de inglés. Tan solo tenía 19 añitos. En la casa donde vivía tenían una colección increible de discos (elepes) y durante los tres meses que estuve, fui oyendo y grabando las canciones que más me gustaban. Poco a poco me gustaría ir poniendo algunas de esas canciones que descubrí por aquel entonces. Hoy os regalo esta en una versión fascinante y super marchosa de la talentosa Randy Crawford, a la que más de uno recordareis por el precioso dueto que hizo con Presuntos Implicados de su canción Fallen. ¡Qué recuerdos con los señores de mi casa, Valerie y Fred! Fueron como unos verdaderos padres para mi, cariñosos, atentos y maravillosos. Hoy estoy un poco meláncolico y oyendo esta canción es imposible que cierta nostalgia me inunde los conductos.
Besos otoñales para todos (y para Teo, muy, muy especialmente)
martes, 28 de septiembre de 2010
Las gaviotas del otoño
Levantando el vuelo ante el coche que se acerca.
Un grupo muy numeroso
viernes, 17 de septiembre de 2010
La mermelada de higos
Todos los ingredientes en la olla.
miércoles, 15 de septiembre de 2010
La cosecha de higos
martes, 7 de septiembre de 2010
Los Temboury
sábado, 21 de agosto de 2010
La piscina, Pura vida 4
miércoles, 11 de agosto de 2010
Cala de las Alberquillas (Maro)
El chico de la bicicleta
María trabajaba en la casa de unos señores. Había dejado Argentina hacía varios años, buscando un presente mejor y dejando a sus dos hijos allá en la distancia. Cada día que veía a Iván, no podía evitar pensar en su primogénito, pero el sentimiento que tenía hacia ambos era muy distinto. María llegaba a su trabajo a las nueve de la mañana y allí permanecía doce horas. Los señores le daban una hora para el almuerzo pero nunca salía para comer.
Iván había dejado sus estudios por falta de motivación y de buenos resultados y sus padres le habían exigido buscar un trabajo si no iba a continuar con su formación. En el taller desde el principio lo habían tratado bien, era un chico despierto y aprendía rápido. La mecánica le parecía mucho más interesante que tener que estudiar latín, o leerse a Platón, o aprenderse la lista interminable de los verbos irregulares. Cada día que veía a María, se acordaba de Alicia, la mujer que le había cuidado de pequeño. Las dos tenían el mismo pelo negro, los mismos ojos de mirada dulce y cristalina y una sonrisa noble que hacían intuir a cualquiera que las viese, las buenas personas que había tras esa fachada de simpatía y cordialidad.
María estaba apunto de cumplir los cuarenta y cuatro años y todos los días se preguntaba cuándo el chico de la bicicleta tendría el valor y el arrojo de saludarla. A Iván le faltaban meses para cumplir la mayoría de edad y no encontraba el momento de saludar a la mujer de tez morena, hasta aquel día que la pobre tropezó y se calló de bruces contra el suelo. La bolsa que llevaba se rompió y todas las naranjas salieron desperdigadas por la acera. Iván dejó por un momento su bicicleta, le preguntó si se encontraba bien y fue recogiendo una a una todas las naranjas. A María no le importó caerse, ni retrasarse en su trabajo, hasta se olvidó por unos instantes del dolor en sus rodillas y manos, porque por fin iba a descubrir el nombre del chico de la bicicleta.
sábado, 24 de julio de 2010
Desde que Lajka llegó...
miércoles, 7 de julio de 2010
¡Qué tarta! ¡Qué buena!
lunes, 5 de julio de 2010
Deep, wide & tall, de Aftec Camera
viernes, 2 de julio de 2010
Invisible, un poema de Felipe Sosa
Se cepilla los dientes seis veces al día
ordena la cama, sacude el polvo
de los muebles supongo que es
su manera de evadir el tiempo
cree que cuando cierra los ojos
nadie puede verla me dice:
cierra los ojos
así nadie puede verte y
sonríe
a veces creo que
lo hace sólo para darme fuerza
quiere que deje de caer quiere que… no sé
a veces pienso que no merezco eso que me da
ya sabes siempre pierdo uno de los calcetines
sólo uno
siempre
me acostumbré a ser un dispar
a soñar sin almohada a usar
la ropa interior más de una vez
soy el manifiesto paradigma
de loquenosedebeser pero aun así ella
me besa
y me acaricia los párpados a veces pienso
que no merezco eso que me da
me asusta
que un día ya no quiera verme
que un día cierre los ojos y se haga invisible
me asusta
ya no verla nunca más.
viernes, 25 de junio de 2010
Han pasado 25 años desde...
jueves, 24 de junio de 2010
Vivo en mi cuarto de baño, por Victor A. Vergara
Durante el día me miro en el espejo durante horas. La vista se me cansa y veo borroso, se me tuerce y temo que no recupere el rumbo. Por las noches salgo de mi encierro voluntario y busco por la casa las cosas que me hacen falta. Saqueo la cocina, tomo prestados algunos libros. Al principio se escuchaban gritos pidiéndome explicaciones. Creo que ya se han olvidado de que existo. Duermo en la bañera, con un montón de toallas apiladas a modo de colchón. A veces comparo mi vida con la de los animales del zoológico, pero sin visitas. Vivo por la inercia del hambre que me induce a buscar comida.
En el mundo me pegaban. Creo que planeaban cómo destruirme. Me encerré aquí por el miedo a no existir, el miedo a algo parecido a un sueño eterno. Nunca comprendí cosa posible.
Me entretengo también pensando que alguien viene a visitarme. Tengo la foto de una mujer que despierta en mí cierto placer. La pongo en el poyete de la bañera y le pregunto qué tal el día. Imagino un jefe con caspa que la tienta, unos compañeros a veces amables. Imagino que me dice te echo de menos. Algunas noches, antes de dormir, le pido que se quite la ropa. Puedo imaginarle una ropa interior diferente cada día. Después sale de la foto y me acompaña en la bañera. No me gusta contar lo que sucede a continuación.
Cuando intento recordar la vida fuera de estas paredes todo aparece desdibujado, lleno de sombras. Me horroriza pensar que he hecho algo mal; puede que sea otra de las razones por las que me fui, no estoy seguro. Mi laberinto es un cuarto de baño que no tiene bifurcación alguna. Como el mundo. Puede que para estar aquí, derrapase en algún pensamiento, alguna de las curvas de mi cerebro. Todos estos pensamientos se acaban cuando recuerdo qué hora es. Escucho voces todos los días. Yo las niego una y otra vez, no puedo aceptar esa realidad. Me siento por encima de todos ellos.
miércoles, 16 de junio de 2010
Por los Baños del Carmen y los Astilleros Nereo
domingo, 6 de junio de 2010
40ª Feria del libro de Málaga, Corazón de mudanza
Y el viernes presenté la novela en la Libreria Luces, donde me trataron de maravilla, me sentí muy arropado y Marga Souviron hizo una presentación muy brillante y con unas lecturas sobre la obra que motivaron un entretenido y posterior debate.
Me hizo especial ilusión volver a ver a Antonia, amiga desde hace casi una década y a la que no veía desde no sé cuándo.
También vino María, desde Córdoba, amiga desde que Estambul nos presentó en 2008, que vino en un viaje relámpago para asistir al acto y es la fotógrafa de la foto de arriba.
Y por último Nuria, compañera de 2º curso de Francés y nueva amiga, que vino bien acompañada por un joven muy simpático. También vinieron otros amigos y eché de menos a algunos que me hubiera gustado ver.
Luego hubo libros vendidos y muchas dedicatorias que firmar. María (otra María) y sus compañeros de Luces, me trataron como a un rey y estuve tan agusto, como pocas veces me he sentido en una presentación. Me sentí como en casa. ¡Mil gracias por un dia memorable!
miércoles, 2 de junio de 2010
lunes, 31 de mayo de 2010
Jaime Santa-Olalla juega con el desamor en Corazón de mudanza, en DIARIO SUR
Ahi podeis leer el artículo publicado hoy.
sábado, 29 de mayo de 2010
Esta noche en Oslo, Festival de Eurovision 2010
lunes, 24 de mayo de 2010
Las hojas muertas por Yves Montand y Edit Piaf
viernes, 21 de mayo de 2010
El arte más efímero
martes, 18 de mayo de 2010
La noche en blanco y Juan Pablo Gamarro
Comenzamos la tarde viendo unas esculturas y unos cuadros en el hotel Room Mate Larios, luego observamos como terminaban de montar algo en la calle Granada esquina con Mendez Nuñez. De allí fuimos a ver un bonito recital de piano en el patio de los Naranjos y luego un descanso para tomar un tapeo rápido con mi otro buen amigo Alex, y de allí nos desplazamos a la plaza de la Constitución para disfrutar del recital mencionado. Entre el precioso repertorio se pudieron escuchar My way, New York New York, La chica de Ipanema, Fly me to the moon o una de mis favoritas de todos los tiempos, Yesterday. También nos regaló Las hojas muertas, preciosa canción francesa que cantaron hace décadas los sublimes Yves Montand y Edif Piaf.
Videoclip del 13 Festival de Málaga
lunes, 17 de mayo de 2010
Fez, una ciudad fascinante 2
viernes, 7 de mayo de 2010
El muñeco que se hizo hombre - CAC
Hace unos meses comencé un curso de Edición y Montaje de Video en el que estoy aprendiendo muchas cosas. Aquí os dejo mi primer trabajo más serio ya montado. La idea fue de unos compañeros de grupo y ellos mismos grabaron unos planos increíbles que hicieron posible este pequeño anuncio. Y otro de esos compañeros hizo de actor, cuyo parecido con el muñeco del CAC fue más que aceptable. Unos pantalones negros, una camisa blanca, unos zapatos oscuros y voila! Espero que os guste.
La historia del anuncio podría resumirse asi: Flaquito, era un muñeco que vivía en la puerta de un museo. Pasaba las horas, los dias, las semanas allí inmóvil, sin poder hacer otra cosa que no fuese ver el movimiento de gente a su alrededor, entrando y saliendo del museo. Pero todos los días 7 de mayo, Flaquito cobraba vida. Se convertía en un muchacho alto y espigado y tenía la oportunidad de dar un paseo por el museo, entrar en las distintas salas, contemplar sus cuadros, sentarse en un banco y ensimismarse observando arte. Pero solo podía hacerlo durante veintisiete minutos. Pasado ese tiempo, debía volver a su forma original de estatua y esperar 365 días para que llegase de nuevo el 7 de mayo...
domingo, 2 de mayo de 2010
Resumen 13 Festival de Málaga
lunes, 26 de abril de 2010
Una hora más en Canarias, de David Serrano
jueves, 22 de abril de 2010
La vida empieza hoy, de Laura Maná
Rabia, de Sebastian Cordero
miércoles, 21 de abril de 2010
El dios de Madera, de Vicente Molina Foix
lunes, 19 de abril de 2010
13 Festival de Málaga, un maratón cinematográfico
Bon Appétit, de David Pinillos
Una historia sencilla con un excelente guión que brilla de principio a fin, cuyos diálogos frescos y llenos de matices, trasmiten una fuerza que dota a la cinta de una credibilidad apabullante. Los actores son otra delicia para los sentidos, Unax Ugalde está más maduro y mejor que nunca. Una banda sonora bien elegida y el escenario natural de Zurich, una belleza desconocida para el que escribe estas líneas, hacen de Bon Appétit una cinta que será recordada con toda seguridad en este festival. Al fin de la rueda de prensa, ante el elogio de uno de los periodistas, “es la mejor película que hemos visto hasta ahora en esta 13ª edición” hubo un aplauso generalizado que demostró el sentir de un gran número de los periodistas allí congregados. Veremos esta noche, como recibe el público esta cinta. Solo me queda desearles Bon Appétit.
sábado, 17 de abril de 2010
Io, Don Giovanni, abre el 13º Festival de Málaga
miércoles, 14 de abril de 2010
Corazón de mudanza, reseña de Margarita Souviron
¡Enhorabuena, Jaime Santa-Olalla!
Margarita Souviron
sábado, 10 de abril de 2010
De mudanzas y corazones, reseña por Omar Kabello
Amigo de Totó y lector de sus delirios, he compartido parte de su proceso creativo, he sido testigo tímido del crecimiento de su segundo hijo, y aunque siempre dio más bien pocos detalles, en su cabeza siempre pareció estar tejiéndose el entramado de la novela que en esta ocasión nos regala.
En ella nos habla de su Málaga, una Málaga tan pequeña como el pañuelo en el que puede llegar a convertirse cualquier ciudad por grande que sea. Pero nos encontramos con tantas Málagas como estados de ánimo de cada uno de los protagonistas, resultando imposible quedarse con tan solo una de ellas. Varias ciudades en una única como si se tratase de un Cubo de Rubik en constante evolución, y en el que todas las soluciones son posibles. Podría tratarse de cualquier ciudad, sin embargo a aquellos que hemos estado alguna vez en la capital de la Costa del Sol, Jaime nos ofrece una serie de guiños reconocibles que nos sumerge en la Málaga con la que nos identificamos, ya sea la más burguesa, represora y tradicional o la más cosmopolita, cultural y alternativa.
En ella nos habla de vidas cruzadas, de caminos de vida laberínticos, en los que los personajes a fuerza de buscarse a sí mismos y de creerse perdidos, coinciden unos con otros para en ocasiones encontrar juntos la salida, y en otras separarse de nuevo y conseguirlo en solitario. Nos habla de una partida de ajedrez de movimientos caóticos en la que todos los jugadores pierden para poder ser ganadores. De peones comidos que nunca pretendieron declarar su amor a la reina ni jaque al rey, de alfiles hambrientos que limitan sus vidas al destino que les marca un pobre tablero, de caballos que saltan dibujando libres figuras.
La tristeza marca una pauta, sin embargo es tan solo el pistoletazo de salida de una carrera dolorosa aunque constructiva y necesaria, porqué el Ave Fénix se esconde en cada uno de los personajes esperando a que algún otro encienda la mecha y poder renacer de sus propias cenizas.
Nos presenta un relato a ratos optimista, en ocasiones desgarrador y en el que un perverso toque de humor negro salpimienta unas vidas en principio ajenas, con las que iniciamos un viaje incierto que nos acaba llevando a través de parajes ya visitados por la universalidad que representa el tormento que todos hemos sufrido en algún momento. Y lo hace de una manera terriblemente visual, como no podía ser de otra forma al conocer su pasión por el séptimo arte. En cada una de las páginas, como secuencias de un largometraje coral de historias infinitas, Jaime nos sienta en una confortable sala de cine salpicándonos con imágenes enfocadas a través de las palabras. Y es que la fluidez de sus diálogos, tan realistas como cinematográficos y su fácil lectura, nos hacen devorar la novela de principio a fin, sin desear la pausa intermedia que deshaga el mágico enganche que nos provoca cada uno de sus personajes a medida que las páginas de la mano derecha van menguando.
Amigo, escritor, cineasta y alma en búsqueda constante, Jaime se retrata en Corazón de mudanza a través de cada uno de sus personajes, las situaciones que viven, sus miedos, esperanzas, aspiraciones e incertidumbres. Nos ofrece un trozo de Corazón, un deseo de mudanza, un grito de libertad que se va labrando camino a medida que avanzan las historias de Mario, las desventuras de Víctor o los avatares de Cristina. Corazón de mudanza es una novela ágil, sencilla, sin pretensiones y sincera, un soplo de espontaneidad, un conjunto de confidencias, un tobogán de emociones que no entiende de leyes de gravedad.
Si bien es cierto que reconozco no ser imparcial por sentirme especialmente cercano tanto al universo de la novela como al autor, no habrá otra forma de poder contradecirme que leyéndola. Así que invito a todo aquel al que haya inspirado una mínima simpatía con el escrito que está a punto de acabar, a que la encargue en su librería más cercana, se haga con ella y la lea. Después hablamos, de Málaga y sus gentes, de mudanzas y corazones.
Omar Kabello
lunes, 5 de abril de 2010
Let´s groove, de Earth, wind and fire
viernes, 2 de abril de 2010
Fantasy, de Earth, wind & fire
Los temas de este mítico grupo de los 70 estarán ahi por más años que pasen. Canciones como September, Boggie Wonderland o Fantasy marcaron una época y han sido versionadas por multitud de cantantes, como la versión de 1990 de Black Box . Los músicos de aquella década destacaron por unas composiciones que han sobrevivido al paso del tiempo. Para el que no la conozca, aqui ofrezco mi regalo de pascua.
jueves, 25 de marzo de 2010
Sección oficial del 13 Festival de Málaga
QUE SE MUERAN LOS FEOS, de Nacho G. Velilla
EL IDIOMA IMPOSIBLE, de Rodrigo Rodero